¿Será porque no es grosera, porque no practica un humor hiriente ni es políticamente incorrecta?
La televisión actual está repleta de personajes desagradables cuya mezquindad nos fascina: Walter White, Don Draper, Frank Underwood, Sherlock Holmes, el doctor House,… Parece que el sarcasmo es el sino de nuestro tiempo: ríete de los demás y así parecerás más inteligente, golpea primero y así no te harán daño.
Anziz Ansari, co-creador de ‘Master of None‘, es un humorista estadounidense, que se granjeó una buena fama gracias a sus ácidos e incómodos monólogos en los que lo mismo te hacía un chiste sobre el abuso a menores que se burlaba de su ascendencia india. De una serie escrita y protagonizada por él podríamos esperar una suerte de ‘Louie’ en versión inmigrante, que usase sin pudor sus penurias y miserias para unos buenos chistes. Nada más lejos del resultado. Junto a Alan Yang (también guionista y productor de ‘Parks and Recreations’) ha creado un homenaje a lo cotidiano, a las relaciones, la familia y el amor en general.
‘Master of None’ no habla de miserias ni de perdedores. Tampoco de grandes hazañas ni de genios. Habla de historias comunes protagonizadas por gente común, tomando la premisa de que no son necesarios grandes dramas para emocionar y de que la mayor parte de la gente de que te rodea son buenas personas que a veces toman malas decisiones. La mayor tragedia que sufre su protagonista es el desamor y los desencuentros familiares, pero ¿no son precisamente esos pequeños dramas los que configuran el 99% de nuestras vidas y nos quitan el sueño a la mayoría de los mortales?
En dos temporadas la serie de Netflix acumula tantas frases para enmarcar, tan excelentes referencias cinematográficas e impecables ejercicios narrativos, que cuesta creer la poca visibilidad que está teniendo esta joya oculta entre tanta superproducción. Tan sólo en esta última temporada destacan el homenaje en blanco y negro al ‘Ladrón de bicicletas'; un conmovedor recorrido de cinco minutos en silencio en un taxi que recuerda al final de ‘El Graduado'; un capítulo construido en torno a diez citas Tinder de forma alternativa; un tema tan complicado como el de la religión resuelto como un conflicto de fidelidad hacia los padres y un cásting de lujo que recupera a Angela Basset y Bobby Cannavale. ‘Master of None’ es magistral.
Sí, estamos enamorados de una serie amable y no nos avergüenza decirlo. Y como buenos amantes queremos poder comentarla con nuestros compañeros de trabajo, familia y todos los que estén dispuestos a escucharnos. Así que, si todo este texto no resulta suficiente, aquí os dejamos con cuatro de sus mejores líneas argumentales representadas en cuatro episodios. Venga, hagamos legión, que queremos más temporadas.
‘Parents’ (Temporada 1, Episodio 2)
Anziz Ansari y Alan Yang son la primera generación de ciudadanos estadounidenses de sus familias, inmigrantes de India y Taiwan respectivamente. El segundo episodio de su primera temporada marca una línea argumental constante en la serie: los conflictos generacionales a los que se suman los culturales, derivados de esta situación. Hijos criados en la cultura del bienestar y en una sociedad con plenos derechos y libertades a los que les cuesta relacionarse con esa otra parte de su historia. Fun fact: los padres de Ansari en la serie son sus padres reales. Puede que no sean muy buenos actores pero son tan adorables que se convertirán en tus personajes favoritos.
‘Mornings’ (Temporada 1, Episodio 9):
El auge y caída de una relación al completo concentrada en las mañanas que una pareja pasa juntas. Ese sutil tratamiento del nacimiento y declive de las relaciones románticas es uno de los puntos fuertes de esta serie.
‘New York, I Love You’ (Temporada 2, Episodio 6)
Un recorrido por el escenario de la serie a través de las historias encadenadas de sus habitantes menos ilustres: el botones de un edificio de lujo, una tendera sorda y un taxista subsahariano. Una verdadera declaración de amor de la serie a la ciudad y de la ciudad a sus minorías.
‘Thanksgiving’ (Temporada 2, Episodio 8)
En ‘Master of None’ muchas cosas ocurren alrededor de una mesa. A su protagonistas le encanta comer y se ayuda de este ritual cultural para resolver gran parte de los conflictos de la trama. Este episodio en concreto relata la relación de la amiga de la infancia de Dev, Denise, con su homosexualidad y su familia a través de sus cenas de Acción de Gracias. Denise es mujer, negra y gay, minoría absoluta. Aquí se reúnen los temas principales de la serie (la familia, la discriminación y las relaciones humanas) con el peculiar tratamiento marca de la casa: la representación de situaciones cotidianas que marcan pequeños cambios en las consciencias. Todo resuelto con humor y cariño.