Picasso dijo en una ocasión que en el arte no hay pasado ni futuro; que el arte que no está en el presente no será jamás. Y, en Málaga, desde hace ya varios años, está más presente que nunca. La sexta ciudad de España en número de habitantes se ha convertido en el gran foco cultural emergente. Aunque ya tuvo su movimiento cultural durante las primeras décadas del siglo XX, motivado por Picasso, ha sido en la última década cuando se ha visto potenciado por la gran oferta de sus museos.
La capital de la Costa del Sol ha conseguido transformar su imagen turística, propia de una zona costera, para situarse entre los mejores destinos de turismo cultural del mundo. Málaga ahora está vinculada a la playa, al sol, al Festival de Cine, pero, también al arte. Y se lo debemos a un proyecto promovido por el Ayuntamiento de la ciudad andaluza. Bajo el nombre, ‘Málaga, ciudad de museos. Donde habita el arte’ pretende subrayar esta apuesta por la cultura.
Con un total de 37 museos y centros expositivos, podría ser considerada perfectamente el principal atractivo artístico del país. Su oferta museística es, sin lugar a dudas, la más competitiva de España. Hace dos años, exactamente, dos filiales internacionales escogieron Málaga para estar presentes en nuestro país. El primero de ellos, el Centre Pompidou Málaga se convirtió en la primera sucursal del centro cultural de París fuera de Francia. Ubicado en El Cubo, invita a recorrer el arte de los siglos XX y XXI a través de sus exposiciones permanentes y temporales, que cuentan con obras de Francis Bacon, Giacometti, Frida Kahlo, Magritte, Miró, Picabio, Tàpies y, por supuesto, Picasso.
Quien se remonta más en el tiempo es, en cambio, la Colección del Museo Ruso. Situado en la antigua Real Fábrica de Tabacos, de 2.000 metros cuadrados y arquitectura regionalista, esta inmensa pinacoteca atesora el legado histórico y artístico ruso de los últimos siglos. Un fondo en constante ampliación que ofrece piezas datadas entre los siglos XV y XX y entre los que se encuentran Kandisnky, Tatlin, Rodchenko o Chagall. San Petersburgo en la Costa del Sol.
Dos “importaciones” que continúan el sendero que ya se inició hace más de una década con el Museo Picasso. Era inviable que el gran artista malagueño no tuviera su propia pinacoteca en su ciudad natal. El museo lleva desde su apertura en 2003 realizando un “ejercicio de memoria” a la figura del considerado como uno de los artistas más importantes del siglo XX. Once salas para realizar un recorrido por 80 años de trabajo a través de las 233 obras que componen la colección permanente y, también, a partir de las 36 exposiciones celebradas, las 210 conferencias impartidas y las 170 actividades culturales organizadas.
El Museo Picasso se ve complementado con la Fundación Picasso del máximo exponente del cubismo. El inmueble en el que nació, situado en el número 15 de la Plaza de la Merced, ha sido declarado Monumento Histórico-Artístico de Interés Nacional en 1983 y, hoy en día acoge obras y objetos personales tanto del artista como de su familia. Más de 80 dibujos y 230 litografías entre las que destacan los bocetos previos a ‘Las señoritas de Aviñon’, que supuso el comienzo de su periodo africano.
En 2011, se unía a ellos el Museo Carmen Thyssen Málaga. Ubicado en pleno centro de la ciudad, en el Palacio de Villalón, posee una colección permanente de 230 obras que recorren el esplendor del siglo XIX español.
No podemos olvidarnos tampoco del CAC (Centro de Arte Contemporáneo). Un edificio histórico, el antiguo Mercado de Mayoristas, acoge multitud de propuestas artísticas y culturales de vanguardia en el Barrio de las Artes. Conocida internacionalmente como el Soho malagueño, esta zona se ha convertido en una galería de arte urbano al aire libre donde grafitis de artistas como Boa Mistura dan personalidad al entorno. Lo que comenzó siendo una iniciativa ciudadana para rehabilitar la zona entre el sur de la Alameda y el Muelle de Heredia, se ha convertido en una inagotable muestra cultural. Museos, galerías, salas y teatros se dan cita en estas calles para crear un auténtico Distrito Cultural que “dinamice el entorno y ofrezca, tanto a la población local como visitante, una moderna y diferenciada oferta de ocio, cultura, comercio y negocio”.
Del 30 de junio al 2 de julio, además, se llevará a cabo en el Palacio de Ferias y Congresos de Málaga la primera edición de la Art Fair Málaga, que con más de 6.000 m2, 400 artistas y 40 galerías de arte se convertirá en la 2º Feria de Arte Contemporáneo más grande de España, después de ARCO. Veintisiete países participarán, pero, serán especialmente relevantes España, Argentina y Portugal, que cuentan con mayor representación. Entre ellos destacamos al Colectivo Pictor, un grupo de artistas independientes que se dedican a la creación pictórica abstracta basada en la investigación experimental. “Los procesos creativos y manifestaciones del Colectivo Pictor se sitúan, de forma mayoritaria pero no exclusiva, en la frontera común de la abstracción neoexpresionista y el neoinformalismo”, explican. Dirigido por Juan Carlos Sanz y compuesto por veinticinco artistas, Colectivo Pictor realiza innovadoras “exposiciones, instalaciones, happenings y performances”.